El Testigo Invisible, de Carmen Posadas

Por recomendación de una buena amiga y gran compañera de trabajo, El Testigo Invisible es mi primera lectura de 2014. Una novela histórica magnífica para comenzar este año y que os animo a leer encarecidamente, porque merece la pena de principio a fin. Además, se convierte en mi segunda lectura del Reto Novela Histórica (¡y ya sólo quedan 13!).

El Testigo Invisible cuenta los últimos años de la funesta vida de los zares de Rusia Nicolás y Alejandra y su cinco hijos, que fueron fusilados en julio de 1918 por los instigadores de la Revolución Rusa originada más de un año antes. Sobre este capítulo tan trascendente en la Historia se han escrito muchos libros y filmado otras tantas películas, pero para esta novela, su autora, Carmen Posadas, buscó otro enfoque que permitiera aportar un toque de originalidad. Y acertó de pleno otorgando la narración en primera persona a Leonid Sednev, quien fue primero deshollinador en el palacio Tsarskoye Selo, la residencia imperial situada a las afueras de San Petersburgo, y más tarde pinche de cocina en los últimos días de los Romanov en Tobolsk y Ekaterinburgo, cuando se convirtieron en presos de la Revolución, tras abdicar Nicolás.

Tanto la existencia de Leonid como la mayor parte de la trama de esta novela se basan en hechos reales. Lo que la escritora se ha permitido es la licencia de que Leonid cuente sus impresiones como «testigo invisible» de la familia imperial más de setenta años después, al borde de la muerte y con la ayuda de una enfermera que le proporciona papel y grabadora para que relate los secretos que lleva tantísimos años guardando sólo para sí mismo.

Así, a través de los recuerdos de Leonid, como lector te conviertes también en testigo de cómo los Zares y sus hijas vivían en un aparente oasis hasta que la llegada de Rasputín primero, y de la Primera Guerra Mundial, después en 1914, trastocan para siempre sus vidas. Leonid se adentra en lo más profundo de Tsarskoye Selo para rememorar escenas cotidianas de las grandes duquesas Olga, Tatiana, María y Anastasia y los angustiosos días en los que el pequeño zarévich Alexis sufría graves crisis, casi fatídicas, como consecuencia de padecer hemofilia, la temible enfermedad que la Reina Victoria de Inglaterra legó a su prole y que salpicó incluso a los Borbones en España.

Los Zares Nicolás y Alejandra con sus cinco hijos en 1907

Como apasionada que soy de este episodio histórico tan único, este libro me ha cautivado desde el primer momento y me lo he leído en apenas 4 días. Su ritmo es trepidante desde el principio y el hecho de que haya capítulos que reproducen los monólogos de Leonid consigo mismo y con la enfermera que lo vigila hacen que en seguida te encariñes con él y otorgues credibilidad a su relato.

Sobre el final de la familia imperial y si hubo realmente supervivientes o no, en esta novela hay por supuesto una teoría muy convincentemente sustentada. Subrayo esto, porque en muchas otras novelas y películas se fomenta la leyenda de que al desenterrar los cadáveres de los zares y sus hijos faltaban restos. Yo, personalmente, me quedo con la opción de Leonid en este libro.

Casa Ipatiev, en Ekaterinburgo. Llamada «la casa del propósito especial», porque fue el lugar donde asesinaron a los Romanov

Respecto a su autora, Carmen Posadas, nunca había leído un libro suyo pero sí muchos artículos en la revista dominical XL Semanal, donde escribe bimensualmente, y que son, sin duda, junto a los de Pérez-Reverte, lo mejor de toda la publicación. Tras lo mucho que me ha gustado El Testigo Invisible, estoy segura de que no será la única y última novela suya que me lea.

Y para terminar, os dejo algunos enlaces a otros libros y películas que tratan sobre la Revolución Rusa y los últimos zares, por si queréis profundizar más y contrastar otros puntos de vista, que hay muchos.

Películas

• Doctor Zhivago. Maravillosa, aunque muy extensa. Es muy interesante cómo reproduce el verdadero efecto de la Revolución en las clases más pudientes. Se basa en el libro de Boris Pasternak y su banda sonora, obra de Maurice Jarre, es espléndida.
• Nicolás y Alejandra. Menos entretenida que Doctor Zhivago pero con muchos detalles de la relación entre los zares y Rasputín, que tantas críticas suscitó.
• Anastasia. La de Disney. Muy bonita pero poco creíble. Para niños.

Libros

• La Casa del Propósito Especial, de John Boyne. Un libro romántico donde los haya, con el toque tan especial que tiene Boyne de escribir y que  le catapultó a la fama con El niño del pijama a rayas.
• La Hija del Zar, de Carolly Erickson. Entretenido, pero en mi caso me aportó muy poco. Ofrece una versión distinta sobre los supervivientes.