Consummatum est, de César Pérez Gellida

Es más difícil de lo que parece escribir reseñas positivas que negativas. A fin de cuentas, cuestionar lo que no nos ha gustado de una película o un libro sale solo. Pero cuando es al contrario, cuesta dar con las palabras que mejor describen por qué algo te ha gustado tanto. Y así me encuentro yo ahora con esta entrada en blanco sin saber muy bien cómo contaros cuánto he disfrutado Consummatum est y por qué. Porque sin duda, me ha parecido una novela sublime dentro de su género, muy distinta a todo lo que he leído hasta ahora y altamente adictiva. Muy adictiva.

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Lectura conjunta Trilogía César Pérez Gellida

Junto con mi amiga Goizeder del blog Cuéntate la vida, os propongo la primera lectura conjunta desde que empecé con la aventura de este blog. Todo surgió porque sin proponerlo hemos leído casi a la vez los dos primeros libros de la trilogía Versos, canciones y trocitos de carne, de César Pérez-Gellida, y nos hemos puesto de acuerdo para culminar esta saga que tantas buenas críticas ha cosechado en la Red.

Queremos invitados a todos los que os apetezca a leerla con nosotras de manera virtual, tanto si es la última parte, Consummatum est, que es la que vamos a leer nosotras, como cualquiera de las otras dos novelas de la trilogía, Memento Mori y Dies Irae. El objetivo es que terminemos este 2014 compartiendo impresiones de la mano de Carapocha, Augusto Ledesma y Ramiro Sancho, entre otros muchos grandes personajes de esta historia.

Dies Irae, de César Pérez Gellida

Por segunda semana consecutiva, reseño la segunda (valga la redundancia) parte de una trilogía. Y al igual que me pasó con Las Guerras de Elena, continuación de El final del Ave Fénix, Dies Irae me ha gustado menos que su primera parte, Memento Mori. Y no es porque no cogiera este libro con ganas, todo lo contrario. Es que simplemente he necesitado avanzar mucho en su lectura, más allá de la mitad de la novela, para poder decir que he disfrutado de verdad este libro. Y es una pena, porque el final me ha parecido magnífico. Seguro que muchos discrepáis con mi opinión…