Contigo Aprendí, de Silvia Grijalba

Me animé a leer este libro tras las buenas reseñas en otros blogs, especialmente en De todo un Poco, que calificaban a Contigo Aprendí como una novela «de 10». A mí también me ha gustado muchísimo. Por su título, que hace honor a ese bolero tan bonito del cantautor Armando Manzanero,  por su portada, tan ilustrativa de la esencia de la protagonista del libro y, por supuesto, por la trama toda en sí, que es original y corriente a la vez, pues aunque basada parcialmente en una historia real, esta novela rebosa frescura, dinamismo y encanto.

Contigo Aprendí cuenta parte de la vida de María Luisa Álvarez, una asturiana que causó sensación en la década de los 30 del siglo XX por su belleza, por su elegancia y, sobre todo, por su entereza al tomar las riendas de su vida y enfrentarse con la misma firmeza a los recuerdos no siempre gratos del pasado y a las perspectivas impredecibles del futuro. El libro comienza cuando José Rodríguez  la elige como esposa y la lleva a vivir a Cuba, donde posee una hacienda y un próspero negocio que le ha convertido en uno de los hombres más ricos de la isla. María Luisa deslumbra inmediatamente en la incipiente sociedad de La Habana, pero tras su apariencia siempre segura de sí misma, esconde en el fondo una lucha contra el recuerdo de un amor de juventud que la mantiene esperanzada mientras trata, a la vez, de enamorarse de José, que demuestra ser un marido entregado, generoso y francamente noble. El destino le tiene preparado un punto de inflexión en el que deberá tomar la decisión más difícil de su vida: apostar por ese amor de juventud nunca enterrado o aferrarse a un presente cómodo pero predecible, sin atisbos de emoción.

Además de tener un final coherente, pero a la vez sorprendente, lo que más me ha gustado de este libro es la sencillez y naturalidad con la que está perfilado el personaje de María Luisa. No le es indiferente ni su belleza ni su estilo, de hecho en el libro hay multitud de escenas en las que se presenta como una mujer caprichosa, arrogante e incluso prepotente. Sin embargo, no crea antipatía en el lector, simplemente es así y en su coherencia de actos y pensamientos está lo extraordinario de esta novela. Hace poco comentaba que personajes como el de Sira Quiroga hay pocos, pero María Luisa Álvarez me ha encantado y creo que está muy a la altura de la protagonista de El Tiempo entre Costuras.

¿Y vosotros con quién os quedáis? ¿Con Sira o con María Luisa?

Anuncio publicitario