Legado en los huesos, de Dolores Redondo

La primera parte de la Trilogía del Baztán, El guardián invisible, me dejó una sensación agridulce. A pesar de que me gustó, me esperaba un libro policíaco más y no lo era. Era una novela negra con muchos tintes de otras temáticas donde abundan los secretos familiares e incluso la mitología. Sin embargo, con Legado en lo huesos, la segunda parte, me he resarcido. Quizás porque ya sabía lo que me esperaba o más bien porque es una novela soberbia, he disfrutado su lectura como una niña.

Legado en los huesos

SPOILER¡¡¡Pasad a FIN DEL SPOILER si no habéis leído El guardián invisible!!!

Legado en los huesos comienza cuando Amaia Salazar ha cumplido su sueño de ser madre (con alguna sorpresa que otra) y se reincorpora al trabajo justo cuando tiene lugar el juicio por el asesinato de Johana Márquez, la joven que fue asesinada por su padrastro en la anterior novela. El juicio nunca llega a celebrarse, porque Jasón Medina se suicida en su celda dejando un misterioso mensaje indescifrable a primera vista. En paralelo, se han producido diversas profanaciones de una iglesia centenaria del Baztán, el valle más místico de Navarra, así como un nuevo caso más de violencia de género en la zona. Todos estos sucesos, que a priori no parecen tener relación entre sí, componen el rompecabezas que la sagaz Amaia debe resolver, a los que se une que ella misma resulta estar implicada mucho más allá de su mero papel como Jefa de Homicidios de la Policía Foral de Navarra. De nuevo, y cuando parecía que ya los había superado, tiene que volver a hacer frente a los temores de su pasado, mientras trata de conciliar vida laboral y familiar. FIN DEL SPOILER

Tres cosas sobresalen en este libro. La primera, el personaje de Amaia, no sólo por su evolución desde El guardián invisible  en lo profesional y en lo personal, sino porque es un personaje de ficción totalmente creíble, que una se imagina como si fuera de carne y hueso y con la que estuviera tomando un café. Dolores Redondo describe a la perfección a la protagonista de esta trilogía, hasta el punto de que es imposible no sentirse identificada con ella por uno u otros motivos, además de cogerle mucho cariño.

La segunda cosa a destacar es la cuidada estructura de la narración, en la que se mantiene el interés del lector de principio a fin, sin que nada choque o sea forzado, como a veces ocurre en otras novelas de este tipo que necesitan un giro para sorprender a quien lo lee. Hay sorpresas, por supuesto, pero tan bien integradas en la trama que todo fluye como el propio río Baztán.

Y, por último, y como ya decía en la reseña de El guardián invisible, la ambientación es magnífica. Tanto de Pamplona, como de Zarautz o de los bosques del Baztán, algunos de los principales escenarios de este libro. La manera en la que la autora entremezcla la esencia de los lugares donde todo sucede con el carácter de los personajes y el devenir de la trama es fabulosa. He vivido en Pamplona y os puedo asegurar que la descripción de la ciudad y su clima es fidedigna. Y que el carácter que estos factores confiere a la personalidad de sus habitantes es visible en los distintos personajes de esta trilogía.

Y un extra: el final… ¡Casi se me sale el corazón por la boca! ¡Qué tensión y qué ganas de leer la tercera parte!

En definitiva, es obvio que me ha encantado y que recomiendo encarecidamente que os adentréis en los misterios del Valle del Baztán de la mano de la inspectora Amaia Salazar.

16 comentarios en «Legado en los huesos, de Dolores Redondo»

  1. No es una novela negra al uso, y a mi al principio la mezcla con la mitología me chirriaba un poco, pero lo cierto es que funciona muy bien en mi opinión. No desentona.
    besos

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